Es literalmente imposible encontrar un lugar más evocador, romántico y apartado que los Bagni della Regina Giovanna. A la sorprendente piscina natural en forma de triángulo rodeada de rocas y vegetación conocida como Bagni della Regina Giovanna se puede llegar con un agradable paseo de 30 minutos desde el centro de Sorrento o 10 minutos en autobús.
El lugar está situado en los acantilados de Capo di Sorrento, donde se encuentran los restos de la imponente villa romana de Pollio Felice (siglo I d.C.), una de las muchas construidas en la costa de Sorrento, un codiciado lugar de vacaciones para los ricos de Campania, de quien descripciones de cronistas de la época.
Además, con el traslado de la corte imperial a Capri, por encargo del emperador Tiberio, ésta se convirtió en una zona especialmente buscada por la aristocracia romana.
Hoy en día se puede acceder libremente (la entrada es gratis) a los Bagni della Regina Giovanna desde el camino terrestre. Como ya hemos dicho anteriormente, se puede llegar al camino en 10 minutos en autobús desde la estación Circumvesuviana de Sorrento. Hay que tener en cuenta que se trata de una zona arqueológica: aquí no encontrarás restaurantes ni ningún tipo de actividad comercial. Estamos en la naturaleza, por lo que hay que traer comida y agua si es necesario.
El sitio se compone de dos partes: la piscina natural y el lado exterior. En ambos puntos podrás colocar tu toalla y luego simplemente disfrutar de un día de playa en total relajación en contacto con la naturaleza.
La mejor época para disfrutar de las maravillas de este oasis protegido es el inicio del verano, cuando las Termas aún no están demasiado concurridas y las temperaturas más suaves hacen que el camino de regreso, que es cuesta arriba, sea menos exigente.
Origen del nombre “Bagni della Regina Giovanna”
Juana II de Anjou-Durazzo, también conocida como Juana II de Nápoles (1371-1435), hija del rey Carlos III de Anjou-Durazzo y de la reina Margarita de Durazzo, sucedió a su hermano Ladislao I en el trono de Nápoles, quien murió sin herederos legítimos. Fue reina de Nápoles desde la muerte de su hermano en 1414 hasta la suya en 1435.
El nombre del sitio está vinculado a la soberana de Nápoles. Se dice que entre 1371 y 1435, Juana II vino de vacaciones al mar acompañada de sus jóvenes amantes con los que pasaba tiempo bañándose en estas aguas. En esencia, el sitio era su “piscina privada“. De ahí, pues, el origen del nombre “Bagni della Regina Giovanna”.
No debe confundirse Juana II de Anjou con Juana de Castilla (1479 –1555) conocida como “La Loca”.